Que mierda de ser las mañanas de un despertar obligado en el eterno día de la marmota.
Que insufrible sensación de obediencia constante en un levantarse diario.
Que negación de naturaleza ante la llamada.
Que amargor de nacimientos involuntarios.
Agonizante abrir de ojos cotidianos.
¡¡Que frío!!…
Desayuno con diamantes pobres.
En 15 minutos estas listo y preparado.
Suerte de calor denso y espeso de motor de coche viejo y barato…
Traje de gala para las mañanas apresuradas.
Hola ¡¡buenos dias!!
Tic tac…que fresca y bonita la mañana invernal.