Ella le dijo:
– Al final has conseguido llegar a lo más alto
+ ¿A lo más alto?, ¿donde?, no te entiendo.- Respondió él
– Ahí, arriba.
+ ¿A que te refieres, no te entiendo.
– Estás irascible – dijo ella
+ Si, estoy irascible, pero no te entiendo
Ella se durmió.
El, pegado a ella, mientras dormía, le dijo:
+ Perdona, es el estrés, el estrés que me he creado en este día que me he creado.
Y la abrazó.