Entristecí

Hoy de pronto entristecí, se me puso un nudo en la garganta del cual todavía no me he desprendido. Creo que se debe al hecho de saberte triste, al hecho de que los días estén siendo duros para tí, y de pronto lo que era empatía positiva se convirtió en mi propia tristeza.

El nudo sigue ahí, en mi garganta, supongo que durmiendo un poco se irá y mañana ya será otro día, pero no quería terminar hoy sin escribir que a veces, muchas veces, la vida nos pone a prueba, y busca de nosotros un empuje hacia lo que realmente queremos. Suele ser cuando estamos en una aparente soledad, y digo aparente porque tu no estás sola, no mientras yo siga respirando, además, no solo estoy yo, sé que aunque no te lo parezca ni den señales de vida hay personas las cuales desean que te vaya bien. Ya sabes que siempre he dicho eso de que lo mejor está por llegar, pero también sé yo que hasta en mi mismo cobra menos fuerza ese pensamiento, que más que pensamiento ya es una ilusión que empezó como certeza. Aún así no pienses ni por un momemto que me voy a rendir en la lucha para ver con mis propios ojos como te has rehecho y como por fin, tras un largo letargo de decepciones, encuentras el sentido a una nueva oportunidad de ser feliz con lo que tu misma has logrado. No será hoy, ni tampoco mañana, será…

Creo que debes mover las fichas hacia adelante en ese invisible tablero de ajedrez en el que deambulamos los seres humanos. Nadie dijo que iba a ser facil, aunque así te lo hubiera parecido hasta hace poco.

Las cuerdas se tensaron y nos rompimos un poco, y es el corazón el que se entristece, pero nunca olvides que en el presente están todas las oportunidades que necsitas para tu misma empujarte hacia el frescor de la vida consciente. La madurez y la valentia de afrontarte con todos tus errores y por supuesto con todos tus aciertos, no olvides estos últimos, no olvides que hay muchas cosas que has hecho bien para tí y para los tuyos, que eres y siempre fuiste una luchadora, y que porque ahora un par de flechas hayan menguado tu fuerza, no es motivo para dejar de avanzar.

Piensa que aquí tienes un buen amigo que estaría dispuesto a llorar y reir contigo. Que esto todavía no ha terminado, y que te quedan todas las opciones que crees haber perdido. Simplemente camina con la mirada puesta en todo lo que eres capaz de sentir, camina hacia lo que realmente desees, con pequeños movimientos, con pequeñas decisiones, que sabes de sobra tomarlas, y cuando por fin te estabilices, espero me hagas un hueco a tu lado para vivir más momentos plenos y llenos de vida.

Mi nudo sigue ahí, así que supongo que no he solucionado nada en mí para contigo, supongo que llorar es lo que acontece para deshacerlo, intentaré no perder la esperanza de verte radiante ante ti misma un día de estos.

No olvides la gran persona que eres y que has sido, recuerdate las virtudes y los aciertos, que no han sido pocos, y regresa reconvertida en esa bella madurez que lleva consigo el peso de la perdida, pero que a la vez siembra la fortuna de haber llegado hasta la esencia de ti misma para poder avanzar hacia lo que desees realmente.

Mi nudo me habla, y me dice que te quiero, sin barreras, sin pedir nada, sin compromisos, simplemente me dice que el se irá cuando sienta que estás satisfecha con todo lo que eres capaz.

Hoy entristecí, y un nudo se puso en mi garganta, todavía sigue ahí, supongo que para mañana ya se habrá ido, pero antes de que se vaya quiero decirte que eres la misma que siempre supo luchar, solo tienes que hacerlo otra vez, y estar orgullpsa de tus decisiones, además hay vida en tus manos, alguien muy especial, alguien que se parece a tí, alguien que te adora, por algo será, por algo será.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *