RECONOCIENDO

Sí, lo reconozco, de pronto, en esta soledad momentanea, en este silencio en el que tan solo se escuchan las manecillas de un reloj, así, tras dejar ella de llenarme con su simple presencia y habiendo perdido un par de buenas oportunidades para con mi relación con un niño de 14 años, así, de repente, …