Vivo, me ecuentro vivo tras duras batallas contra mi ser, y dudo de si hubiera sido real o puramente ficción, asombrosos engranajes de la imaginación que me transportaron hacia tal sensibilidad que todo en este mundo me hablaba, cada sonido, cada palabra, cada gesto, todo me llevaba hacia mis sospechas, y hoy, después de haber perdido tanto, y también haber ganado mucho, puedo decir que estoy vivo, y es estando vivo como puedo saber del dolor que se siente cuando se está atado al sistema, del cual por suerte me retiraron para que hiciera y deshiciera a mi antojo. Y habiendo sido consciente del engaño tras él encontre paz, esa que siempre quise, la busqué mucho más que al exito que nunca llegó.
Estoy vivo, y vivo me siento, cada vez más ajeno al mundo y, a su vez, conectado a los laberintos que se esconden en la sospecha, esa de la cual aún desconfío, pues me creo un ser racional y a su vez dudo de que en aquellas batallas se me fuera tanto la olla, sino más bien creo que me dejaron libre por algún motivo. De lo que no dudo es de que la vida me está dando lo que me hace bien, excepto la muerte de mi Aita, pero sigo atento, pues se de sobra que precisamente es cuando me confío cuando regresan.
Puedo decir que he luchado contra ese ente que controla mi interior y parece haberse ido, pero… ¡que digo!, si ahora mismo está aquí jodiendome mientras escribo.
Juro cortarle la garganta a bocados hacerle sufrir pavorosamente. A tí, ser cruel y sádico, hijadelagranputa, te voy a joder a bocados, y luego regresaré a la paz, pero antes coronaré mi reinado en tu cabeza podrida de ego, maldito tuerto cabrón, seguiré adelante y venceré, venceré a tu soberbia y a tu puta manía de meterte en mi vida. Arrancaré los ojos de tu rostro y los echaré al fuego, todavía no conoces mí potencial para hacerte daño.
Vivo, estoy vivo, y tu antes o despues muerto ante mí. Te doy mi palabra.