NEGACIONISTAS
De primeras la palabra negacionista es un invento que está usando la izquierda para no dejarte la posibilidad licita de dudar, y te digo que yo soy de izquierdas muy a la izquierda, y que la duda siempre te lleva a preguntarte y con ella puedas quizas llegar a la verdad, pero en cuanto a la pregunta de sí soy negacionista me podría extender mucho, lo resumiré.
Creo que el virus existe, y que ha matado a mucha gente, pero a la vez creo que los gobiernos están aprovechando el tirón para meternos con calzador leyes absurdas, como por ejemplo la de no poder estar de pie en la barra de un bar pero si en cambio puedes estar sentado en un taburete en ese mismo espacio de la barra del bar, o la de que el dueño de un bar no pueda servir más allá de las 12 aunque la hora fijada para el cierre ahora es a la 1, son normas de conducta. Como estás tropecientas. Y a la vez esa obsesión por destrozar el ocio nocturno me huele a que Europa da un dinero a España para placar los efectos económicos de la pandemia a cambio de modificar nuestros hábitos, la forma de vivir en España. En los países del norte de Europa hace ya tiempo que no hay vida nocturna, es España un oasis en ese sentido, de ahí el turismo, pero a la Merkel y compañia se les ha terminado la paciencia con tanta fiesta y tanto jolgorio en España, es como un vecino ruidoso, y sí, os damos unos millones pero empezad a cambiar las costumbres de vuestro pueblo, de tal forma que llegue el momento que a las 6 de la tarde no haya lugar en todo el país para tomarte una cerveza o un zumo. ¿Negacionista?, como me dijo el amigo Silverio Carmona «yo tengo el derecho de negar lo que quiera» siempre que no me den pruebas cientificas que demuestren lo que afirman, y visto está que un dia te dicen una cosa y otro día otra.
Afirmo que el virus existe, pero también afirmo que ha sido fabricado en un laboratorio, y afirmo que hay muchos intereses detras de todo esto y que a sú vez nos están amaestrando, o si lo prefieres preparando para vivir en una sociedad calculada, más controlada, la cual jamás volverá a ser la misma, ¡jamas!. Ya no entro en el tema del negocio de las vacunas o el supuesto famoso chip que nos quieren injertar, eso lo dejo para cuando sea una realidad.
Lo que es seguro es que en toda esta historia de la pandemia hay unas cortinas de humo que algún dia se sabrán como se saben hoy del 11S, o del atentado de Madrid y de otros atentados contra la vida y los derechos minimamente humanos.
A ver, por ejempo, lo del 11S hay y hubo un montón de arquitectos los cuales afirman que era imposible que por el impacto de un avión donde inpacto los edificios no podian haberse desplomado de esa manera, arquitectonicamente era imposible, y sí era normal ese derrumbamienteo si hubieses puesto unas cargas explosivas en las bases de las torres. Es decir los aviones existieron, pero se dice que fue algo controlado y sincronizado. No lo digo yo, lo dicen miles de arquitectos. Por otro lado el atentado de Madrid se dijo que si habia sido ETA y se compró a muchos políticos y periodistas para que se afirmara tal cosa, y luego se demostro que fueron los Arabes por la masacre que habian hecho los gobiernos de USA (George Bush), Inglaterra (Tony Blair) y España (Jose Maria Aznar) llevandonos a una guerra por las supuestas armas de destrucción masivas que supuestamente había en Irak, armas que jamás se encontraron. Quién nos dice que no nos estan mintiendo ahora.
Y en cuanto al chip, es una conspiranoia muy conspiranoica, lo sé, pero no hay que ser muy listo para poder preveer (si no en estas vacunas) que el hombre está destinado a fusionarse con la maquina, y que los gobiernos están muy interesados en controlar a sus pueblos, así que que nos implantaran tarde o temprano un pequeñisimo chip en nuestro cuerpo el cual diera unos datos base de nuestro ser no es fliparla demasiado, que luego todo eso se extenderá y ya haremos nuestras compras con chip, iremos al médico con chip, y en definitiva tendrán la información que en realidad ya tienen mediante nuestros telefonos inteligentes y tarjeras de credito. Ya saben qué comemos, como nos lo pasamos bien, qué gastamos y en qué, qué pensamos, por qué luchamos, cuantos hijos tenemos y multitud de información, así que el chip, aunque no sea en la vacuna, será vendido como una comodidad más de la tecnología.