Decido escribir la letra de la última canción de mi otro yo
Y no se me ocurre otra emoción que la de estar vivo
Pues no concivo música en la muerte
En estos días en los que conocidos han fallecido
Así que quizá como homenaje, o tal vez como profeta
Escribo aquí esta letra por si un día yo faltara
Y me doy cuenta que en lugar de a la vida
Le estoy escribiendo a la muerte en el futuro presente
Guárdame este momento que tanto quiero
Sobre toda a ella y a su cachorro
Que si bien no creo y no predico
Si que guardo respeto siendo el más rico
Rico por tener el tiempo y el amor de lado
Ese que deja en mí un buen sabor salado
De horas infinitamente bellas
Que me dan paz y conciencia
Y no noches de aquellas
Quisiera decir aquí que aunque nunca renuncié
No necesito el aplauso para agradecer
Quisiera decir de aquí al amanecer
Que cuido con calma sus sueños y su padecer
Encuentro sentido a la vida inclusive con la muerte
Entre tantas soledades que a veces desesperan
Los hay que nada esperan y nada tienen
Y los hay que mucho siembran y no recogen
Por eso es importante el sentir al escribir
En esta madrugada sutil en la que me acompaña
No es palabra de Dios ni tampoco gran azaña
Pero es orgullo de estar vivo en la batalla
Querer se quiere a mucha gente en una vida
Pero realmente pocos la viven contigo
A ratos estan unos y a otros ratos otros
Y cuando ya no estés todos seguiran su paso
Así que hoy no hay trago amargo, ni flores, ni espanto
Tan solo un corazón latiendo en su frasco
De fragancia sutil emoción y cordura
Ni la sed más dura bebió de este agua pura
Claridad en los sentidos y los errores
Y en las fuertes convicciones para perdonar
Amar y ser amado y dejar todo a un lado
Con el tiempo parado en las noches del extasis
Recuerdo olvidar el pasado y crecer en abandonos
Si pudiera de algún modo me saldría de la esfera
Y no necesito el aplauso por ello como ya he dicho
Ni quiero medallas, ni famas, ni vida de ricos
Me alimento del silencio que produce la suerte
De poder ser consciente y no perderme
El ruido se ha ido, pero sé que volverá
Por eso cada segundo de paz me sabe a victoria
Y guardo sus sueños, que nada les falte
De ese modo recuerdo que no he sido Padre
Al fin y al cabo libre y vivo y un poco desastre
Sin enredos endiablados ni reproches confusos
Hay algo que no recuerdo y que hizo de mi un loco
Mejor loco que enfermo, y mucho más que comprendo
Aquí paz y después aire
Que respiro todavía
Seguramente algún día
Regrese al futuro presente
Pero amo y soy amado
Por qué pedir más de mi lado
Tuve quién se quedó conmigo
Incluso cuando soy frío
Ya es más que todos los frutos prohibidos de toda mi vida
Y ya ni recuerdo el por qué escribía
Ah si entiendo, es la utima canción
de Arbusto Crower y de corazón