LIBRES

Dejaremos que la ciudad nos guíe y así tal vez recordemos cada susurro, que si se nos encoge el alma se nos agrande la sed, y que por las manías nos descubra la noche entre el calor de los cuerpos y el equibrio de la mente. Puede que de ese modo nos cambien los presentes, …

AQUÉL DESPERTAR

Cómo un suave pañuelo de seda recorrí cada parte de tú cuerpo que húmedo se asombraba de la vida, y fueron tus ojos verdes los que encontré frente a los míos, casi por casualidad rocé uno de tus pechos y en ese momento todos tus poros de la piél se herizaron tanto que pude sentirlos …

RAIZ DE FURIA Y SED

Recuerdo recordar que estuve loco… y desperté de la ausencia. Recuerdo despertar enloquecido… y resurgir en la cordura. Y ahora cuerdo y aliviado me encuentro la soledad que dejó a su paso… como cuando me abandonas por no saber seguir. Ya no necesito la inquietud que suponía aquél fuego… aunque solo me demuestre que estaba …

No Lo Haré

El día que supe que ya no estabas recordé que dejé de buscarte, por eso logré vencerte. El dìa que supe que habías vuelto dejé de tomar pastillas, para poder escucharte y decirte que nunca fuí tuyo, que nunca te creí, y que jamás volverias a verme hundido. Por eso me sabe mal que quisieras …

MORIR UN POCO

Nos quedan tan solo unas cuantas miserias en los bolsillos, de familias que esconden esa nada que nunca se dice. Y pasaron los años tras la ventana, días y noches de terca soledad, como cuando uno ya se viste solo, tras esos calcetines viejos que nunca se fueron. Por eso nada nuevo acontece, ya que …